Todos conocemos esta exclamación¨Yes¨, muchas veces la usamos cuando nuestros hijos responden adecuadamente a una enseñanza y junto con la exclamación nos llenamos de alegria, risas y carcajadas o cuando logramos una meta que costo muchas horas de esfuerzo. De esta misma forma pienso que nuestro Dios reacciona cuando nosotros estamos frente a su palabra y entendemos lo que él quiere decirnos. Por muchos años he sido pentecostal y lo seguire siendo, pero no hace mucho he descubierto la mayor riqueza que da el Espiritu Santo y es el ser guiado a la verdad. Es un placer que no se puede explicar, cuando la verdad de la palabra es abierta por el Espiritu Santo nuestra mente es como un rio que fluye hacia Cristo y lo único que puedo decir o exclamar en esos momentos es JESUS MI DIOS, CUAN GRANDE ERES!, y uno llora ante su presencia como niño. Meditar su palabra y ser guiado a la verdad por el Espiritu Santo es el mayor de los regalos recibido, porque estas nos llevan a Jesús y logramos...
Meditando en la palabra de Dios