Todos los predicadores deberiamos imitar a Juan el bautista en Juan 3:28-30. Estos versiculos son parte del contexto donde los discipulos de Juan discutian con los judios acerca de la purificación y hablaban con Juan acerca de que Jesús bautizaba al otro lado del Jordan.En estos versiculos encontramos la sorprendente verdad de que el gozo de Juan radicaba en escuchar la voz del esposo y no en ser el mensajero. Una de las cosas que se puede ver inicialmente y que cambia mi perspectiva y espero que la tuya, es que la base para la predicación no radica exclusivamente en el sentido de urgencia de "id y predicad el evangelio..." (Mateo 28:19-20), sino que en Juan 3:28-30 encontramos un sentido de mayor deleite, que no va en contra de la urgencia sino mas bien la transforma en un deseo urgente por el gozo de escuchar siempre al esposo . Este gozo no se encuentra en el acto de predicar como la fuente de gozo, ni tampoco de hablar de nosotros mismos como quizas p...
Meditando en la palabra de Dios